Es increíble como en un instante y en un accidente perdemos la vida. Se no has ido un joven con inmensas ganas de vivir y que estaba preparándose para ofrecer lo mejor de su talento y de su destreza en pro del billar panamericano. Lo conocí en Managua en persona y me pareció un estupendo personaje con una extraordinaria calidad humana.
Me expresó el inmenso orgullo que sentía jugar por su patria, enarbolar su bandera y competir con los mejores en un ambiente diferente. Dio un paso al frente y se dispuso a trabajar para ser un referente como persona, como amigo y como un gran jugador de pool. Perdió su última partida con la vida y nos queda su legado alegre con la firmeza que iremos sumando adeptos a lo mejor del billar organizado en el territorio panamericano.
Estés donde estés amigo, recibe el más grande abrazo y que brille para ti la luz perpetua. Descansa en Paz Jesús de la Hoz “Aretico” !
Carlos Rivera